Vitartis, la Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, que promueve incrementar la competitividad de la Industria Alimentaria, cumple 10 años. ¿Que cómo lo celebraron? Nada más y nada menos que organizando el Primer Congreso de la Industria Alimentaria en Castilla y León, los días 28 de febrero y 1 de marzo.
Durante este encuentro, se realizaron debates con grandes ponentes para analizar los retos del sector, conectar empresas y plantear soluciones a la situación actual. Los temas de este Congreso fueron: la sostenibilidad y mejora del medio ambiente, los modelos de innovación, las claves para la competitividad, la industria 4.0, las nuevas tecnologías y el papel de la mujer directiva.
Verónica Pascual Boé, CEO de Asti TechGroup y directora de un grupo de empresas vinculadas con la tecnología y la transformación digital, Pablo Oliete, socio fundador de FOM y director académico de cuatro másteres en Industria 4.0 y Eduardo Álvarez, director general de RTVCYL, como moderador, abrieron la sesión del viernes 1 de marzo con la ponencia Industria 4.0. Retos y oportunidades para la industria alimentaria. En esta se plasmaron algunas ideas claras para orientar el reto de aplicar las tecnologías habilitadoras presentes en la revolución industrial a nuestro negocio y como aprovechar las oportunidades que nos ofrece.
La industria tecnológica no es solo producir más, mejor y más barato, también es desarrollar nuevos modelos de negocio basados en la oportunidad que nos presenta la confluencia de doce tecnologías habilitadoras. Estas tecnologías no se han creado para la industria 4.0 específicamente, sino que se han desarrollado en un ámbito social mucho más amplio.
Tener una industria fluida es interesante, pero ¿cómo se empieza?, ¿cómo evoluciona el cliente? Son preguntas que pueden ayudar a planificar el proceso para progresar hacia el cambio tecnológico. Como explicaba Verónica Pascual, hay que ser consientes de que producimos tecnología. La tecnología no es un fin en sí misma, sino un medio facilitador para conseguir nuestros objetivos, “un vehículo sin conductor”.
Pablo Oliete expuso de forma muy útil las tres palancas necesarias para el desarrollo de una industria 4.0.
- Colaboración entre personas y empresas, evitando así el individualismo, ya que la mejora del negocio y de la digitalización es beneficiosa para todos.
- Tecnología como medio necesario para facilitar el cambio.
- Talento en los equipos de las empresas, es importante tener muy presente el factor humano en la industria 4.0.
La formación tal y como afirmaron los dos ponentes, es fundamental. El mercado laboral pide altas competencias para los nuevos puestos relacionados con la tecnología y muchos de ellos no pueden cubrirse por falta de personal especializado en este sector. Es importante tener en cuenta que la formación es recomendable hacerla antes de que esta sea necesaria para nuestro trabajo. Es importante fomentar la formación en empresas y también de forma particular.
Sin duda, podemos decir que la industria 4.0 es un reto para las empresas. ¡Pero lleno de oportunidades!